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miércoles, 12 de septiembre de 2012

Ellos están ahí, a tu lado.


A veces, la franca mayoría de las veces, hablamos de fenómenos paranormales como algo lejano a nosotros, algo que le sucede a la gente, a los demás, pero nunca nos afecta a nosotros con un grado notorio de protagonismo.

Y es que a veces, la franca mayoría de las veces, ellos están ahí pero tú no los percibes, o ellos no quieren que tú los percibas.

¿Cuantas veces hemos oído crujir el armario mientras intentábamos conciliar el sueño en nuestra cama?, ¿cuantas veces vas a coger algo, no lo encuentras, y se halla en un lugar que tú no recordabas haberlo dejado?, ¿cuantas veces has tenido la sensación de no estar sólo, o te has sentido observado?, ¿cuantas veces has dado explicación lógica o científica a algo que no te explicabas en un primer momento?, ect...

Nuestro amigo de hoy sí quiso hacerse notar, de una forma muy sutil, aunque al final acabó asustando a los incrédulos protagonistas. Dos protagonistas, un par de adolescentes, que a partir de ese instante, el que veremos en el vídeo, sentirán un escalofrío por su columna vertebral cuando oigan crujir un mueble, encuentren las cosas en un sitio que no recordaban, se sientan observados, ect...



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